IKA RETE (IKA IRETE): PATAKÍES, SIGNIFICADO, CONSEJOS OBRAS O EBBOSES Y SECRETOS.
Ika Rete Omo Oluche Oma Ileke Kiri Kiri Banla Abaniye Batitu Eure, Eyele Lebo, Kaferefun Shangó. Oggún Ati Olofin. Maferefun Yalorde Ati Olokun.
DICE IFÁ IKA RETE
- Usted tiene un pesar o sentimiento que lo puede llevar a la muerte.
- Algunas veces le duele el pecho y se siente un viento o aire que le corre del pulmón al pecho y no le ha dado importancia, vaya inmediatamente al cardiólogo; cuídese no sea cosa que le dé un infarto.
- Échese el mundo en sus espaldas y viva apacible y tranquilo.
- Múdese lo más pronto posible de donde vive o de lo contrario sus enemigos acabaran con usted.
- Usted puede caer en manos de la justicia.
- Está obsesado por un Eggun que lo persigue, hasta inclusive, vive con usted.
- Cuídese la boca, pues en lo que usted está comiendo hay algo que le está haciendo daño, aunque usted no se haya percatado de eso.
- A usted le vienen tres suertes.
- Usted piensa mudarse o ir a algún lugar, no lo haga sin antes hacer ebbo.
- Usted tiene que darle algo a Oshún o a Eshu.
- Tres personas han de llegar a su casa con hambre. Usted dará de comer, porque esas personas le traerán suerte.
- Tenga cuidado con una enfermedad y páguele lo que usted le debe a los Santos.
- Su enemigo vive frente a su casa, es una mujer colorada.
- Si usted está embarazada no coma pescado hasta que no pasen siete días.
- Fíjese que a la hora de usted dar a luz va a ser un «corre corre».
- Su padre está muerto.
- Múdese lejos de sus enemigos.
- En un trato que usted está pensando le van a negar un dinero.
- A usted lo van a convidar a una fiesta, tenga cuidado con lo que come y bebe.
- A usted lo quieren matar.
- Tenga cuidado que la criatura está muerta, y para que la madre no muera tendrá que hacer rogación.
EN ESTE SIGNO NACE
- El ataque de clancia.
- La ceremonia de atefar en que se desata a orunmila y se hace el recorrido por las 16 tierras.
- Rosa, la mayor de las Yemayá de la tierra Ebagdo.
DESCRIPCIÓN DEL ODDUN
- Aquí fue donde Ifá le dijo a Orunmila que saliera a buscar ñame y lo salcochara y las cáscaras las botara para la calle, para que le viniera la suerte.
- Cuando se ve este Ifá el awo le echa ewefa a Eshu y bota para la calle y al que llegue se le da de tomar el que quedó.
- Cuando se ve este Ifá hay que tocarse el pecho con el puño de la mano derecha.
- El pez muere por la boca.
- Este Ifá prende a las personas.
- Habla de infiltración pulmonar que se complica y se muere por hemoptisis.
- La persona se otoku entre dos luces.
- Por intori arun no se da seguridad.
- Con una eku se limpia todos los días que marque Ifá en nombre de Oluo Popo y de Aggayú, después se suelta viva en la manigua. Además, owunko capón y lino del río para obini oboñu, para que pueda parir.
- Aquí habla una Yemayá Ibú Maraiga, sincretizada con Santa María del Cervallon.
- Nació rosa, la mayor de las Yemayá de la tierra Ebagdo.
- Para el pecho, licor de güira: se prepara echando la misma cantidad de güira y de oñí y se toma una cucharadita por la mañana, al mediodía y por la noche.
- Yemayá salió del mar para destruir la tierra Awado.
- Ifá de cambios, de envidia, de personas que tratan con 2 caras.
- No se puede decir secreto con que uno se salva, pues el enemigo oculto lo vence.
- Aquí nació el ataque de clancia.
- La mujer se vuelve loca a consecuencia de un parto.
- Habla la caraira (el aura de cuello largo y blanco, que mientras ella no come las demás auras no se comen la carroña).
- Habla de enfermedad del corazón.
EWE DEL SIGNO
Lino de Oshún, uva caleta, acacia y uva gomosa.
OBRAS DE IKA RETE.
OBRA PARA DESENVOLVIMIENTO:
- Se pela un ishu (ñame), llamando a Elegbara, y se le ruega. Terminando de pelar el ñame, se recogen todas las cascarás y se llevan hacia la calle, y una mitad se echa en la esquina de la derecha y la otra mitad en la esquina de la izquierda de la casa, y en el conten; se llama a Elegbara y se le da cuenta haciendo y ofrendándole gbogbo tenuyen de ishu, se regresa al ilé y se comienza a salcochar el ishu no dejándolo ablandar mucho a fin de que quede duro.
- Con ese ishu salcochado, se hacen tres bolas echándoles: eku, eya, epo, awado, obi motiwao, obi kola y oñí.
- Se le da obi omi tuto a Elegbara, se le enciende una itana, se le presentan las tres bolas de ishu en un plato, se le pide que le conceda lo que desea resolver, se le pone delante y se le echa a Elegbara un poco de oñí. Las bolas se le dejan tres días.
- Prepara omiero de ewe: itamorreal, ewe dundun, hojas de ishu, eku, eya, epo, awado, otí, oñí, atare meta, para que la persona se bañe.
- Al tercer día se ponen las tres bolas de ishu en un papel de traza, se hace sarayeye con ellas y se botan en tres lugares distintos. Una bola de ishu con los ingredientes señalados en cada papel de traza.
- Al cuarto día se hace ebbo con: akuko fifeshu, opolopo quimbombo, gbogbo asho, tela de araña del ilé, atitan bata, ati ilé de afuera de la casa, de las cuatro esquinas, eran malu, oñí, adie, pedazos de jícara, un eya tuto entero, eku, eya, abiti, itana meyi, obi seco, demás ingredientes.
- Al quinto día, ya limpio Elegbara, se le da obi omi tuto a el y a Oggún poniéndole primero a Elegbara tres quimbombó crudos y a Oggún gbogbo tenuyen quemados y calientes.
OPARALDO DE IKA RETE.
Se coge asho pupua, se limpia a la persona. Se pinta un círculo con efun, dentro del mismo se pinta: Otura Niko, Ika Rete E Irete Yero. Sobre la atena se coloca el eya tuto keke al que antes se le pinta Ika Rete por ambos lados, y se le pone atare mesan, se le pone igba meyi con otí, una al lado de cada itana.
Se limpia bien a la persona con ewe kankan en nombre de Oluo Popo y se echa encima del eya tuto keke. Se le hace sarayeye con el osiadie llamando bien a Eggun y a Shangó, cantando el siguiente suyere: “Sarayeye Shangó Mowo Lele Eggun Oriye Lona Kamariyen Ikú”.
Después se sacrifica el osiadie jabao, se obi omi tuto; se tapa todo con asho pupua y se lleva a su detino preguntado con el obi. Se termina con la ceremonia del omiero, en esta ocasión solo con ewe kan kan, invocando a Oluo Popo.
EBBO: Akuko, 2 etu, 2 obi, ashe timbelara, otí, orí, efun.
EBBO PARA EMBARAZADA: Dos adie, una para osun y se coge lino y se le da en cocimiento 4 tazas que queden entre iyefa de la rogación y a la última parirá el hijo muerto.
EBBO: Intori aru: tres cujes y ota; intori ikú: auko, las piedras se rompen en el ebbo, owo la maro.
EBBO: Eya, maiz, ekru, olele, $4.20.
EBBO: Akuko, adie meyi, adele medilogun, igba, omi, oñí, otí, eku, eya, ou, awado, bogbo ashe, itana, eya tuto keke, opolopo owo.
NOTA: A los adele se le quitan las plumas, se ponen en una igba con añari, eku, eya y se le echa iyefa del ebbo, y se le da eyebale de adie meyi y umbeboro con añari y las leri de adie. Él ella keke se tiene con el ori en el leri mientras omubo, al cerrar se echa dentro del ebbo.
EBBO: Eyele meyi, un akuko, basura de la plaza y una cajita.
REZOS Y SUYERES.
REZO: Ika Rete Omo Oluche Oma Ileke Kiri Kiri Banla Abaniye Batitu Eure, Eyele Lebo, Kaferefun Shangó. Oggún Ati Olofin. Maferefun Yalorde Ati Olokun.
REZO: Ika Rete Ika Eri Awo Avile Almova Ori Shangó, Ifá Owo Matumbao Mafarawo Kumaosa Moni Ifá Losheeri Ofina Yeye Awo Omo Niro Ifá Oddun Layeo Awori Ofoyu Awo Ifá Lodun Bifarun Untefa Awo Odara Adele Otun Ni Adele Osin Awo Osin Ashe Wele Shiwele Ifá Lodun Komo Laye Oro Kansuoko Agba Inle Ifá Oma Yeni Awo Ifá Lodun Era Untefa Lodafun Shangó Kaferefun Orunmila, Olokun Ofo Toshu Adele Olaye.
REFRANES
- El pez muere por la boca.
RELACIÓN DE HISTORIAS O PATAKÍES DE IKA RETE.
1.- NACE LA CEREMONIA DE DESATAR Y LIMPIAR A IFÁ PARA ATEFAR.
REZO: Ika Rete Ika Eri Awo Avile Almova Ori Shangó, Ifá Owo Matumbao Mafarawo Kumaosa Moni Ifá Losheeri Ofina Yeye Awo Omo Niro Ifá Oddun Layeo Awori Ofoyu Awo Ifá Lodun Bifarun Untefa Awo Odara Adele Otun Ni Adele Osin Awo Osin Ashe Wele Shiwele Ifá Lodun Komo Laye Oro Kansuoko Agba Inle Ifá Oma Yeni Awo Ifá Lodun Era Untefa Lodafun Shangó Kaferefun Orunmila, Olokun Ofo Toshu Adele Olaye.
EBBO: Akuko, adie meyi, adele medilogun, igba, omi, oñí, otí, eku. eya, ou, awado, bogbo ashe, itana, eyatuto keke, opolopo owo.
NOTA: A los adele se le quitan las plumas, se ponen en una igba con añari, eku, eya y se le echa iyefa del ebbo, y se le da eyebale de adie meyi y umbeboro con añari y las leri de adie. El eya keke se tiene con el orí en el leri mientras omubo, al cerrar se echa dentro del ebbo.
PATAKIN:
En la tierra de Ikaeri vivía Awo Ifalokun, quien estaba atado por Olokun, ya que no quería que revelara a la gente de esa tierra las cosas que Olokun hacía. Esto se debía a que no le habían hecho Ifá cuando era niño y Olokun se lo había llevado a su tierra, Ikaeri. Awo Ifalokun siempre adivinaba todo para la gente a través de Okpele Ifá, ya que él no sabía utilizar Ifá, ya que Olokun no quería que lo aprendiera y por eso se lo había llevado de casa de su padrino Awo Omonire, quien vivía en la tierra Oddun Layeo, que era la tierra de Shangó.
Un día, Awo Omonire se hizo Osode y vio Ika Rete, que era el signo de Awo Ifalodun, y pensó: «Hace años que no veo a mi hijo y dice Ika Rete que tiene dificultades con Olokun». Tomó dos gallos blancos y un macho y se fue en camino hacia la tierra de Ikaeri. A mitad de camino, se encontró con Shangó y le contó adónde iba. Shangó le dijo: «Voy contigo, ya que él nació en la tierra que yo gobierno, que es Oddun Layeo».
Cuando llegaron a la tierra de Ikaeri, fueron directamente a ver a Olokun, quien los recibió con desconfianza y les dijo: «Anda por ahí, ya que él no tiene casa fija y anda con su Ifá encima». Awo Omonire le dijo a Shangó: «Vamos a buscarlo». Salieron y lo encontraron tirando Okpele a mucha gente debajo de un árbol de Ewe Oú y tenía muchos peces a su lado, ya que esas personas eran pescadores y le pagaban con peces. Cuando Awo Ifalodun vio a Awo Omonire y a Shango, aunque había salido muy pequeño de la tierra Oddun Layeo, los reconoció y se echó a llorar. Se abrazaron y él les contó el trabajo que tenía para adivinar, pero que siempre lo hacía.
En ese momento, Aye y Olokun tuvieron un hijo llamado Iña, y Aye se fue de la casa de Olokun. A partir de ese momento, Olokun comenzó a perder su riqueza, por lo que decidió buscar a Awo Omonire y a Shangó. Los encontró junto a Awo Ifalodun y le pidió a Awo Omonire que consultara a Ifá con la ayuda de Adele Awerenifa.
Sin embargo, Awo Omonire le dijo que no podía mirarlo y le recomendó que su hijo, Awo Ifalodun, lo hiciera en su lugar. Aunque Olokun tenía dudas sobre la habilidad de Awo Ifalodun para realizar la consulta, Shangó le dio un consejo y le mostró cómo realizar el ritual adecuadamente.
Shangó le dio un Oponfa a Awo Ifalodun y le dijo que sacara Adele Tunle Awerenifa que tenía ahí, y cuando lo hiciera, dijera: «Ifá bi bogbo Adele Ifá Oddun Ifá Seni». Awo Ifalodun estaba nervioso, pero Shangó lo animó y le indicó cómo continuar.
Después de realizar el ritual correctamente, Awo Ifalodun se sintió más seguro y se puso los Adeles Tunde Awerin Ifá en la frente y dijo: «Ni Ifá Ru Agba Untefa, Ofira Yeyemi». Esto significaba que el que nació siendo esclavo, ahora caminaba junto a él y que se iluminara.
Ahora échalos en la igba y haces lo mismo que yo te enseñe y vas a contarlo para saber que tienes:
- 5 adele en la mano derecha: Ifá Afun Oashe (5 orden a Ifá).
- 5 adele en la mano izquierda: Ifá Ewa Osa (10 congrasados dan la vida a Ifá).
- 3 adele en la mano derecha: Ifá Osa Ogunda (3 caminos marcan el tiempo de Ifá).
- 2 adele en la mano izquierda: Ifá Eyirete (2 figuras señalan a Ifá).
- 1 adele en la mano derecha: Okan shonshon kinufidan kinubaye (uno solo es el que reparte el poder como esclavo de la Tierra).
Coge los 5 adele que te quedan en la mano izquierda y dí: “Adele Marun Ninsheku Ifá” (5 siempre son vigilante de ese poder). En cada momento awo omonire respondía: “Otana Ikaku Ota Oyomu” (de un lugar a otro adele destruye al enemigo). Shangó le dijo: “límpiate como te enseñe y coge de nuevo adele tunda awori in Ifá y vamos a caminar las tierras que Ifá camino para ser lo es. Tócate las piernas de otun a osi y di:
- Awo lode… .la luz del sol.
- Awo loda… la creacion del mundo.
- Awo loma… la inteligencia.
- Awo lokun… el nacimiento de la vida.
- Awo igba… la jícara, primera cosa que tuvo Orunla.
- Awo oko… el campo donde Orunla obtenía su comida.
- Awo ibayu… el paraíso, árbol donde reposó Orunla.
- Awo akuko… el gallo, primer acompañnante de Orunla.
- Awo okuni… el hombre, primer heredero de Orunla.
- Awo anfin… el hombre rubio.
- Awo amanfin… los albinos.
- Awo oyigbo… el hombre blanco.
- Awo kukundunkun… el hombre mestizo.
- Awo filani… el hombre chino.
- Awo ashe… el poder que da Orunla a los hombres.
Ahora cógelo y cuéntalos todos como te enseñé y a los 5 que te quedan en la mano restregarlos por Inle Owere con owo otun y dí: «Awara Wara Okuni Orisha Awara Wara Oba Ifá Weo (despacio, los Santos machos limpian al rey).” Coge los adele con owo osi y dí: “Awara Wara Obini Orisha Awara Wara Oba Ifá Weo” (despacio los Santos mujeres limpian al rey). Coge los 5 adele mételo debajo de la estera y dí: “Adele Arun Tetenibo Aye” (testigos del cielo cuidan la tierra).
Entonces awo Omonire le dijo a so omo Ifalodun: “espera que Esta tierra lleva un secreto que la falta y se llama ifaye Owodele” y cogió 16 dilogun y los emzarto en cuero de ounko de Elegba y lo amarraron y lo puso delante de la estera y le dijo a awo Ifalogun: “pon uno de esos adele ahí”, entonces awo omonire le rezó: “Adele Otun Kale Ashe Were Ifá Osin Ifá Awore Ikarete Layeni Ifá”.
Y entonces cantó: “Olorin Ifá Adele Agba Deyogba”. Entonces awo omonire dijo a su omo awo Ifalodun: moyugba y atefa, y a olokun le salió Ika Rete donde awo Omonire le dijo: “tu gran problema es que esta tierra necesita que la gente tenga sus cosas de Ifá para que haya más suerte y no solo adorar las otas que tú tienes”, y cogió adele que el mar botaba y la arena y le dijo a awo Ifalodun: “coge esto y échale añari, eku, eya y ponlo dentro del ebbo que le vas a hacer a Olokun y dale esta adie.”
Cuando empezaron a hacer el ebbo awo Omonire, Shangó e Ifalodun se pusieron eya tuto keke de los que tenía en la igba y cuando terminaron el ebbo lo echaron dentro de esta, y le dijeron a Olokun que lo llevara a onika. Cuando Olokun regresó a su casa ya Aye había regresado con todas las riquezas y Olokun mandaba a todos sus hijos a casa de awo Ifalodun para que este les diera lo que necesitaban: Awofakan, ikofa, untefa ni Orunmila. Donde awo Omonire le dijo a su omo awo Ifalodun: “siempre ten tus ikinis con añari para las gentes y de ahí los de aquella tierra regresó y awo Ifalodun omo Ikarete awo Omonire el apoyo de Olokun, Shangó y de su Babarinifa awo Omonire.”
2.- NACE EL ATAQUE DE CLANCIA.
PATAKIN:
Yemayá vivía con Obatalá y quedó embarazada. Durante el tiempo de gestación, sufrió algunas complicaciones de salud. El día del parto, Obatalá estaba comiendo pescado y al escuchar los gritos de dolor de Yemayá, se atravesó una espina en la garganta.
Yemayá sufría mucho porque no podía dar a luz y comenzó a tener convulsiones violentas. Obatalá trató de ayudarla y logró quitarle la espina, pero después de muchos sufrimientos, Yemayá finalmente dio a luz a su hijo, a quien Obatalá llamó Inle. Luego, Obatalá salió corriendo de la casa y se dirigió hacia la costa, donde se lanzó al mar junto con su hijo.
En la costa, vivía Abita, la hija de Yemayá, quien por ser muy fea, vivía alejada del mundo. Ella recogió al niño y lo crió, pero cuando Inle creció, vivió materialmente con ella. Yemayá se quedó viviendo en el mar y cada vez que recordaba a su pequeño hijo, Inle, entraba en un ataque de locura y salía furiosamente del mar a buscarlo, arrasando todo lo que encontraba en su camino.
NOTA: Aquí nació el ataque de clancia. Su mujer se vuelve loca a consecuencia de un parto.
3.- LA INCRÉDULA.
PATAKIN:
Había una mujer que vendía hilos en la plaza y su negocio no andaba bien y fue a mirarse con Orunmila. Le salió este Ifá, que le ordenó ebbo con: dos eyele, un akuko, basura de la plaza y una cajita para que subiera, pero ella no lo hizo. Había otro vendedor oyéndolo todo y como también estaba mal le dijo a Orunmila que le hiciera a él ese ebbo. Orunmila se lo hizo y su suerte mejoró.
4.- CUANDO OLOFIN NO TENÍA PARADERO FIJO.
REZO: Ika Rete Ozain Bawe Bimoshekun Eyebi Sherawe Oshinshin Ozain, Olofin Owadewo Olofin Omo Osunimi Ewe Belekun Ozain Omo Yekun Asho Fun Fun Orolu Agba Kile Olofin Ikawayete Omo Osha Ifá Mayekun Obori Nifa Awo Ikawayate Ika Ewe Irete Moyun Ifá Olofin Ayakale Eran Aralogun Olofin Gbogbo Omo Nifa Oshe Aibowofun Arewoshe Ozain Awo Ikawayate Lodafun Ozain Kaferefun Olofin.
EBBO: Akuko, eyele meyi fun fun, ou, atare, gbogbo ashe, ewefa medilogun, gbogbo tenuyen, opolopo orí, leri eya tuto, eku, eya, opolopo efun, obi, oñí, awado, opolopo owo.
Awo Ika Rete debe de recibir a Olofin, y de vez en cuando darle eyele meyi fun fun. Darle eyerbale a su leri y a un omiero de ewe hiedra, higo, yanten, salvia, orozus, romero, mejorana, hierba buena, toronjil de menta, anís de españa, flor de marmol, ceiba, iroko, iwereyeye, ou, moruro.
Con ese omiero limpia a olofin rezando: “Olofin Ikawayate Omogara Awawe Enifa Olofin Igba Oddun Awawe Olofin”. Para darle de comer se le pone una leri de eya tuto encima. Después se coge un algodón grande, se coge la leri del eya tuto que tenía encima Olofin y se le echa eru, obi kola, atare medilogun, orí, efun, obiabon; se le pone en la leri y se reza: “Orí Laye Olofin Mori Salu Olorun Mori Mori Ori Kadi Yeye Awo Ikawayate Ika Rete Oddun Orinifa”.
Se le deja tres días en la leri. La eyele se cocina en una cazuela nueva y durante tres días va comiendo de ella, que se ponen ocultas en el igbodun. Durante esos tres días awo Ika Rete no puede salir del igbodun ni hablar con nadie. Al tercer día se lo quita de su leri, se lava la leri con el omiero y el ashe, en la última agua se echa el agua de dos cocos tiernos y opolopo orí y efun.
Se seca con asho fun fun en el que se coloca después lo que tenía en su leri con los restos de la eyele. Coge lo del leri y se lo presenta a olorun rezando: “Modupue Babami Fobae Modupue Fobae Fobae Olofin Ayabi Orun Omo Orun Sarawao Awo Agolona Babami Modupe Fobae Awolode”.
Entonces lo lleva a leri oke, y al ponerlo allí canta: “Awo Enire Enifa Olofin Modupue Fobae Iré Layeo”.
PATAKIN:
En la tierra de Mayekun Enifa vivía Awo Ikawayate, quien era Omo Ika Rete y Omo Ozain. Él siempre limpiaba a todas las personas de esa tierra con asho fun fun, opolopo ori y opolopo efun. Para hacerlo, llamaba a Obatalá Osha Fun Fun Orolu, quien le había enseñado ese secreto, y al limpiarlos, cantaba: «Babá Fun Fun Jekuao Asho Fun Fun Orolu Babá Jekuao«.
Pero la gente de esa tierra no lo consideraba ni siquiera los demás awoses porque, a pesar de ser Omo Ozain, usaba pocas ewes en su trabajo. Olofin en esa época no tenía un lugar fijo donde quedarse, porque siempre se estaba trasladando de una tierra a otra para consagrar a los omofa, y aunque todos les daban de comer, nadie se ocupaba de limpiarlo, y toda la sangre y las juju que tenía pegadas encima le ocasionaban un mal olor, por lo que la gente no se le acercaba, excepto por lo que les interesaba resolver y después se alejaban de su lado debido a la suciedad que tenía.
Por esa razón, Olofin siempre estaba llorando y no se quedaba en ninguna tierra. Un día, cuando iban a consagrar a un omofa en Ifá, en la tierra de Mayekun Enifa, comenzaron a llamar a Olofin: «Babá Olofin Ayagba Olorun Iba Leri Oba Babá Tiyoko Babá Enifa». Al oír que lo estaban llamando, Olofin se puso en camino, pero cuando llegó a la tierra de Mayekun Enifa, era tan fuerte el mal olor que tenía que todos los omofa se fueron y lo dejaron solo, por lo que Olofin salió llorando.
Por el camino se encontró con Awo Ika Rete que, al reconocerlo, se arrodilló ante él y le rindió moforibale y le dijo: «Agba kile Olofin. Olofin aye agba yare Awo Ika Rete». Entonces le dijo a Olofin: «Babá, a usted, al igual que a mí, nadie nos considera, pero a usted es porque nadie lo limpia. Yo lo voy a bañar para que no tenga más ese olor desagradable».
Después de bañar a Olofin con las ewes y el omiero preparado por Ozain y Awo Ika Rete, Olofin pidió que le dieran eyerbale de eyele fun fun meyi y se lo pusiera en la cabeza. Luego, pidió que lo bañaran de nuevo y que la cabeza del eya tuto se pusiera sobre el ou con el que lo habían bañado anteriormente.
Ozain le dio a Olofin algunos ingredientes, incluyendo eru, obi kola, efun, obi edun, 16 itana y 16 atare, y le dijo a Awo Ika Rete que se pusiera los ashe en la cabeza. Awo Ika Rete cantó: «Ori Laye Olofin Mori Salu Olofin Mori Mori Ori Kadi Yeye Awo Ikawayate Ika Rete Oddun Orenifa».
Olofin instruyó a Awo Ika Rete a dejar todo lo que habían quitado de su cuerpo en un joro joro, y luego hacerle osode. Después de esto, Olofin pidió que se llevara todo a Agba Eri Oke y que lo llamaran para acompañarlos. Él dijo que siempre estaría agradecido con Awo Ika Rete y Ozain por haberlo bañado y limpiado, y por haberlo bendecido.
Después de llegar a la tierra Mayekun Enifa, Olofin y awo Ika Rete fueron directamente al igbodun de Ifá. Al llegar allí, se dieron cuenta de que todos estaban mal y cantaban: «Afoyun Bodun Onife Afoyun Bodun Orilleo Awo Omafoyu Olofin Bodun Enifa Afoyu Bodun Orileo». Todos se pusieron de rodillas y se quedaron asombrados al ver a Olofin tan limpio.
Olofin les dijo que esto solo lo hicieron awo Ikawayate Ika Rete y Ozain, y de ahora en adelante, todo lo que se haga con él tiene que estar presente awo Ika Rete y Ozain, quienes son los únicos que tienen el valor de bañarlo y vestirlo. Desde entonces, comenzaron a considerar a awo Ikawayate. Por eso, Olofin viste de asho fun fun y lleva opolopo orí y efun.
5.- AWO EYA BOMU.
REZO: Ika Rete Awo Eya Bomu Adifafun Olofin Ati Shangó Onidolaye Awo Ori Mobare Ika Rete Inishe Eni Eyigba Ofede Eya Orun, Eya Onire Oba Orun Ayamora Kueni Okuni Eleya Bi Eya Basun Eya Mora Afiye Shangó Ebeya Ni Eya Kueto Ni Oshe Gbogbo Oni Titunde Ella Titun Awo Inun Ire Yemayá Odada Aye Babá Boni Eggun Adeya Awo Lodafun Orunmila.
EBBO: Akuko, eya tuto, un jamo, dos anzuelos, pita, vara de pescar, yarako, gbogbo ashe, akere, omi okun, eku, eya, demás ingredientes, opolopo owo.
PATAKIN:
Awo Eya Bomu era el rey de los peces y a la vez era muy cercano a Shangó y Yemayá. Debido a las virtudes que le otorgaron estos Orishas, era respetado y obedecido por todos. Awo Eya Bomu se volvió muy orgulloso por su gran fortuna y en un momento ya no necesitaba a Shangó ni a Yemayá para hacer ciertas cosas. En su territorio vivía Awo Abeya, un awo modesto que decidió visitar a Awo Eya Bomu después de escuchar sobre su fama.
Cuando llegó, encontró a Awo Eya Bomu gobernando sobre todos los habitantes de la tierra, incluyendo Mogba, el territorio de Shangó, lo que Awo Abeya desconocía. Awo Eya Bomu desafió a Awo Abeya a ver quién conocía más Ifá. Awo Eya Bomu hizo una consulta y vio Ika Rete, luego le pidió a Awo Abeya que hablara sobre Ifá.
Awo Abeya dijo a todos los presentes: «El pez muere por la boca», es decir, que debemos hablar lo menos posible y hacer un ebbo con akuko, anzuelos, meyi, fango del río, pita de pescar, jamo, y otros ingredientes. Awo eya bomu solo quería humillarlo, así que se rió y le dijo a la gente que no necesitaban hacer ese ebbo. Awo Abeya se fue, llamando a Shangó en el camino: «Shangó, Kola Oniyunta. Eya Enu Gbogbo Enu Lofe Lofeya Mogba. Shangó, Kola Eni Yunto».
Por el camino, se encontró con Shangó y le contó sobre la arrogancia y el trato desagradable de Awo Eya Bomu. Shangó se enfureció y fue a la tierra de Awo Eya Bomu, en Mogba. Al llegar, vio a Awo Eya Bomu rodeado de sus hijos, y se abalanzó sobre él para atraparlo, pero Awo Eya Bomu al verlo, saltó al mar y huyó con sus hijos.
En ese momento llegó Yemayá, quien había visto todo lo que había pasado. Al ver a Shangó tan enojado, le dijo: «Esta es mi casa y no puedes matarlo aquí». Entonces Shangó le respondió: «Respeto que vivas en la casa de Yemayá, pero cuando salgas de ella, será para alimentar y salvar a la gente de la tierra, y tú morirás. To Iban Eshu.» Shangó entregó el jamo, los anzuelos, la pita, etc. a la gente y les dijo que lo usaran para atrapar a Awo Eya Bomu y a sus hijos, pero solo para su propio beneficio. Desde entonces, los peces viven en el agua y no pueden salir de ella, porque si lo hacen, mueren.
NOTA: Por este Ifá no se puede comer pescado de ninguna forma, hay que hacer el ebbo y el inshe siguiente: después del ebbo, los anzuelos y el jamo se le pone uno a Yemayá y el otro a Elegbara. Al eya tuto se le pinta Ika Rete por ambos lados y se le pone a Shangó y se le da el akuko a Shangó junto con Oggún para que en su vida se libre de los problemas.
6.- EL PEZ MUERE POR LA BOCA.
EBBO: Akuko, eyele meyi, akofa meta, una lanza, una punta de marfil, un palo, una mosca, omi ilé ibu, una corona, asho arae, asho timbelara, tierra de los zapatos, de la casa, abiti, eku, eya, itana meyi, obi seco, demás ingredientes, opolopo owo.
PATAKIN:
Había una vez un hombre cuya fama de cazador de elefantes se había extendido por toda la selva. Había matado a tantos que exterminó a todos los que se encontraban a muchas leguas del poblado donde él residía.
Este cazador era conocido como ekege efon, y la melancolía anidaba en su corazón desde el día en que tuvo que permanecer inactivo, fumando en su pipa a la sombra de los altos árboles y escuchando las historias que salían de las bocas sabias de los ancianos. Ya no quedaba en toda aquella región un elefante al que pudiera dar muerte con sus afiladas flechas y su poderosa lanza, que ahora estaban arrinconadas y se deterioraban en el lugar más oscuro de su casa.
Llegó el día en que ese cazador decidió trasladarse a tierras lejanas en busca del placer morboso que le proporcionaba matar a tan grande y noble animal, fiel compañero del hombre en las guerras y en el trabajo. Después de mucho caminar, se encontró con el rey de los elefantes, que estaba viejo y enfermo, mientras remojaba su arrugada piel en las limpias aguas de un arroyo. Sin compasión alguna, le dio una alevosa muerte.
Sucedió que la madre de ese cazador había seguido a su hijo y cuando lo encontró, ambos se alojaron en una choza dentro de la profunda selva de esa tierra. La hija del rey de los elefantes, conocida como irun lewe, conocedora de la perfidia y crueldad de aquel cazador, juró tomar venganza de la muerte de su padre.
Y por la fuerza de su poder de transformación, la joven elefanta se convirtió en una hermosa muchacha que caminando días y noches por aquella inmensa selva iba buscando noticias del paradero de aquel despiadado cazador. Hasta que finalmente lo encontró sentado en la puerta de su choza, pensando sin dudas en la próxima cacería de elefantes que estaba preparando.
La joven, que en realidad era la hija del rey de los elefantes, había logrado infiltrarse en la vida del cazador para vengar la muerte de su padre. Durante varios días vivió con él, aparentando ser feliz y enamorada, pero en realidad planeando su venganza.
Un día, cuando salieron juntos de caza, la joven encontró la oportunidad de cumplir su objetivo. Cuando llegaron al lugar donde se encontraba el resto de los elefantes, ella se transformó en su forma original y los animales la reconocieron como la hija del rey de los elefantes. Entonces, los elefantes atacaron al cazador y lo mataron.
La madre del cazador, quien había desaprobado la unión de su hijo con la joven desconocida, quedó devastada al enterarse de su muerte. La hija del rey de los elefantes, habiendo cumplido su venganza, desapareció en la selva, nunca más volviendo a ser vista.
Instalaron su habitación al lado de la alcohola de la madre y ébano, como el la había nombrado, antes de acostarse le pregunto: “¿dime cuál poder tan grande es el tuyo que sin ayuda ajena matas a elefantes salvajes como nadie antes lo ha hecho, dándoles alevosa muerte? A mis oídos llego el rumor de que el rey de los elefantes sin que te hubiera hecho daño alguno le diste muerte, sin que él se diera cuenta que un hombre se le encimaba. Dime, «¿en qué consiste ese poder que tienes?”.
Él, embriagado de orgullo y de alcohol, le contestó: “mi querida ébano, eso es muy sencillo, mi poder consiste en la facultad que tengo para transformarme en cosas y animales distintos; cuando hiero a un elefante con mi poderosa lanza, al atacarme furioso con su trompa, me convierto en tronco de árbol, si él va a golpear el tronco me convierto en hojas.”
En esto el cazador oyó la voz de su madre que lo llamaba. Él le respondió: “¿por qué interrumpe la afligida madre desde la otra habitación?” Duérmete, le ordenó molesto el hijo. Y todo quedó en silencio. Pasado algunos días, Iran Lewe (ébano) como él la llamaba, le pidió de nuevo al cazador que continuara la historia inconclusa, de su poder para matar elefantes, pues el deseo de venganza cada vez era más fuerte en el corazón y la mente de la desgraciada elefantica. El cazador Ekege Efon continuó la narración.
Si descubro que el elefante es demasiado inteligente y severo, me transformo en mosca y me poso sobre él sin que pueda herirme con su furia, lo demás ya es más fácil. Otra vez corrió el tiempo sin que la infelicidad se interpusiera en el corazón Ekege Efon. En una noche oscura cuando aún la luna no había asomado plenamente en el cielo su bruñida cara y el bosque estaba sumido en impenetrable oscuridad Iran Lewe. En silencio, como si sus pies fueran alas huyó de la choza y se internó en lo profundo de la selva, retomando su verdadero ser de elefanta joven, hermosa y fuerte.
Ekege Efon, al darse cuenta de la huída de su joven mujer, corrió triste y furioso con sus armas (arco, flechas y lanza) detrás de la fugitiva y cuando el sol volvió a encender el día, los hombres de la más cercana aldea que habían ido a trabajar a las tierras quedaron aterrados al ver sus cultivos desechos por las huellas de un enorme elefante. Con la velocidad del viento fueron en busca de Ekege Efon y cuando lo localizaron, al saber para que lo buscaban se olvidó de la mujer fugitiva y contento y orgulloso por la nueva oportunidad que se le presentaba de lucir sus dotes de invencible cazador, pensó que la joven mujer desaparecida regresaría a él al saber de su nueva hazaña.
Ekege Efon, presuntuoso, salió en busca del elefante siguiendo sus huellas, pero la elefanta que lo esperaba emboscada, al verlo, arremetió contra él sin darle tiempo a utilizar sus poderes. El cazador atemorizado, se fue convirtiendo en troncos, en hojas y por último en mosca y se puso a revolotear y a zumbar sobre la cabeza de la elefanta hasta que se posó sobre su cuello.
La elefanta vio, llegado el momento de triunfo y dándose un fuerte golpe con su trompa en el lugar donde estaba posada la mosca. Él derribó herido de muerte al suelo; poco a poco la mosca se fue convirtiendo en el cazador. La elefanta llegó ante él y se transformó en la mujer, y él al reconocer a su amada ébano le dijo con débil voz: “¿cómo es esto posible?”
Ella le dijo,” yo soy la hija del rey de los elefantes que asesinaste a traición sin darle tiempo a defenderse y yo lo he vengado”. Y así murió el cazador.
NOTA: No se puede decir el secreto con que uno se salva, pues el enemigo oculto lo vence.
7.- EL CÓMO IKA RETE VENCIÓ A SUS ENEMIGOS “OBA KELETU”.
REZO: Ika Rete Oyá Abori Mesan Adifafun Oba Keletu Eggun Oloye Omodorun Inle Kiya Efufu Lele Lojun Orun Okan Nani Abere Ikubalele Oluo Popo Abori Eggun Shangó Loko Iyanzan Laya Ika Rete Osha Oyu Awo Ifarobi Oshe Obole Iré Yemayá Alakani Shangó Oyá Oyishe Obini Shangó Akaraye Orun Onifaye Lodafun Orunmila Lodafun Igi.
EBBO: Akuko, adie meyi, etu okan, igi fun fun (acacia), eya tuto keke, ewe kankan (escoba amarga), osiadie, ewe shewerekuekue, asho pupua, dun dun, ati, fun fun, asho timbelara, igba meyi, itana meyi, gbogbo ashe, demás ingredientes, opolopo owo.
DISTRIBUCIÓN: Akuko fifeshu, osiadie, ewe igi fun fun, ewe kankan, ewe shwerekuekue, eya tuto keke, gbogbo asho, demás ingredientes para oparaldo; adie meyi a yanza en ilé ikú, de su leri a leri Eggun malaguidi lese igi fun fun sobre la leri del muñeco de igi acacia o palo blanco. Se entierra allí. Con la etu sarayeye todos los días que marque Ifá y después se le da Oluo Popo.
PATAKIN:
Awo Ifarobi vivía en la tierra de Omodorun y era hijo de Shangó y Yemayá, por lo que siempre tenía sus bendiciones. Todo lo que hacía le salía bien, por lo que tenía mucha fama, a tal punto que la gente decía que en toda aquella tierra no había otro awo como él.
Sin embargo, también tenía muchos enemigos ocultos que le hacían trabajos de brujería, lo que le causaba muchos malestares. Awo Ifarobi era de Oyá, pero ella se había separado de Shangó y Yemayá y ahora estaba acompañada por Oluo Popo. Awo Ifarobi necesitaba un secreto que no se conocía en aquella tierra.
Un día, Awo Ifarobi se hizo osode y se vio Ika Rete, que le dijo que tenía que darle unyen al Eggun de su iyare y una adie. Sin embargo, los enemigos de Awo Ifarobi, los Oba Ogu, lo estaban esperando y le tenían preparada una leri de eggun para acabar con su vida.
Cuando Awo Ifarobi llegó a la puerta de Inle Yegua para darle la adie al Eggun de su iyare, sus enemigos lo atacaron y lo dejaron moribundo con una leri de Eggun a su lado.
Shangó y Yemayá no sabían nada de su hijo y comenzaron a buscarlo. Oyá y Oluo Popo, que nunca habían visitado la tierra de Omodorun, decidieron ir a buscarlo también.
Cuando llegaron al ilé Yegua de la tierra de Omodorun, encontraron a Awo Ifarobi medio muerto en shilekun ilé y con una leri de Eggun a su lado.
Ellos lo llevaron y lo condujeron hacia el interior de ilé Yegua, donde encontraron un igui fun fun (mata de acacia, o bien vestido, o palo blanco) donde Oyá lo recostó y la leri de Eggun la colocó a su lado. Luego, cogió la adie que Awo Ifarobi tenía dentro de su apo y comenzó a llamar a Oba Keletu: «Oba Keletu Omodorun Eggun Made Yewa Igui Balele Ayagba Leleri Ayagba Lele Oyá Made Kolasho Igui Ba Leleri O».
Y Oba Keletu se presentó, Oyá cogió las adie y se las dio a leri agba Eggun y a leri de Awo Ifarobi, y cantaba: «Awori Oya Mafun Eye Dide Dideo Oba Keletu Eggun Irebi Oyá Mola Eleya Dide«. Entonces, Awo Ifarobi se recuperó y Oluo Popo cogió una etu y comenzó a limpiarlo mientras cantaba: «Pesebe Awo Ñaña Bosoibe«.
Después, se comieron la etu junto con Oba Keletu. Cuando Awo Ifarobi se recuperó completamente, partieron rumbo al ilé de Awo Ifarobi. Por el camino, se encontraron con Shangó y Yemayá, que andaban buscando a su hijo. Awo Ifarobi, al ver a sus padres, se tiró en el suelo, les dio moforibale y besó la tierra. Luego, les contó todo lo que le había sucedido.
Shangó le dijo: «Voy a hacerte operaldo». Shangó cogió eya tuto kke, le pintó Ika Rete y le puso asho pupua, lo limpió con eso, puso igba meyi con otí a su lado y cogió osiadie shewerekuekue (pollo jabao) y le hizo oparaldo cantando: «Sarayeye Shangó Mowuo Lele Eggun Oriye Lona Kamariyen Ikú». Después, Oluo Popo lo bañó con omiero de ewe kankan, cogió de su ashe y del de Oyá y lo ligó con el de su Ifá y le dijo: «Con esto, tus enemigos no te vencerán, y con eso mismo que te quisieron destruir, te salvarás».
Awo Ifarobi sacó de su bolsa la leri agba Eggun que los enemigos habían preparado para destruirlo. Le agregó los siguientes ingredientes: eru, obi kola, aira, raíz de igui fun fun, de aragba, de atori, atitan osi de inle Yegua (tierra de la parte izquierda de la entrada del cementerio), ilé de leri de aya, leri de eku, asho arae, asho mesan. A esa leri agba Eggun le dio unyen.
Entonces le dijo: «este era el secreto que te faltaba. Se llama Oba Keletu Eggun Olu Aye. La pondrás a vivir en el patio de tu casa cubierta de asho mesan y cada vez que te sientas mal, lo llevas al ilé Yegua y al pie de un igui fun fun, le das adie a este secreto desde tu propia leri.»
Entonces todas las gentes de la tierra Omoderun conocieron los poderes de Oluo Popo y de Oyá y dijeron: aunque somos omo ni Shangó y omo ni Yemayá, siempre que los necesitemos, adoraremos a Oyá y a Oluo Popo al igual que lo hace Awo Ifarobi. Así, cada vez que necesitemos la ayuda de Oyá y de Oluo Popo, los llamaremos y ellos vendrán en nuestra ayuda sin que Yemayá y Shangó se opongan, porque ellos fueron los que salvaron a su omo Awo Ifarobi.