Orunmila: Guía Completa

ORULA Ú ORUNMILA: CONOCE SU SIGNIFICADO, HISTORIA, ATRIBUTOS, OFRENDAS, ATENCIÓN, REZOS, FRASES, SINCRETISMO

 

 

¿QUIÉN ES ORULA?

orula

Orula, también conocido como Orunmila. Es considerado el Orisha de la sabiduría, la adivinación y el destino. A continuación, te proporcionaré información sobre Orula según la tradición yoruba:

Orula es venerado como el Orisha de la adivinación y es conocido como el «Orisha del destino». Se le atribuye el conocimiento de los caminos de la vida y la capacidad de revelar el futuro y las situaciones ocultas. Es considerado el dueño del Tablero de Ifá, un sistema de adivinación utilizado por los babalawos (sacerdotes de Ifá) para comunicarse con los Orishas y obtener orientación en la toma de decisiones y la resolución de problemas.

Orula se asocia con la inteligencia, la intuición y la clarividencia. Se cree que tiene el poder de ver más allá de lo visible y proporcionar consejos y soluciones para superar obstáculos en la vida. Los seguidores de Orula buscan su orientación a través de la consulta de Ifá, un proceso de adivinación en el que el babalawo arroja varios objetos y realiza una interpretación basada en los patrones resultantes.

Orula u Orunmilá, nació después que Oggún cometiera el atropello en la persona de su madre. Orula es el único Orisha que posee los secretos adivinatorios de Ifá. Es considerado como el médico de las almas por excelencia. Dueño de los cuatro vientos que representan el tiempo y los cuatro puntos cardinales. Es con gran severidad que impone su mandato y quien no acate sus consejos, sea Hombre u Orisha, se expone a ser víctima de sus castigos inducidos por Eshu.

Fue Shangó quien, con la autorización de Olofi, le proporcionó a Orula el até (tablero de adivinar) y el dominio de los secretos de adivinar. Es el revelador del futuro y personifica la sabiduría y a la posibilidad de influir sobre el destino. Es además el dueño de poseedor del secreto de Ifá, Oráculo Supremo y del Ekuele,mediante el cual se comunica, Inclusive tratar de mediar en la adversidad. No se asienta en la cabeza y solo se comunica a través de sus oráculos con el Ekuele y dos manos de cocos pequeños.

Orula no tiene bailes específicos ya que no se monta, pero se ejecutan bailes en su honor, los cuales no tienen características distintivas. Orula es el adivino por excelencia, este es su verdadero rol dentro de la religión no tiene otra misión sino la de interpretar el deseo y los mensajes de otros Orishas y los únicos traductores de Orula son los Babalawos.

Su poder es tan grande dentro de la religión que cuando reclama a alguien para ser su hijo o mensajero, el elegido tendrá que abandonar el culto a cualquier otro Orisha para dedicarse a él. El primer paso es recibir la mano de Orula (Abo Faca) a la cual tienen acceso solo los elegidos.

Las mujeres tienen acceso a Orula por medio de una ceremonia similar (Ico Fa) en la cual también reciben la mano de Orula, pero no pueden continuar en línea ascendente, ya que este es el nivel más elevado que pueden alcanzar las mujeres con relación a Ifá. Las así iniciadas se les conoce como apetebí y se las considera esposas de la deidad y copartícipes de algunos de sus secretos. La apetebí Ideal es la hija de Oshún, y el pleno acceso a todos los secretos de Ifá solo lo tienen algunos hombres rigurosamente escogidos. Ninguna mujer, así como tampoco ningún hombre con indefiniciones sexuales puede ser Babalawo. A Orula solo lo atienden dentro de la religión Yoruba, los Babalawos, pero se le pueden hacer banquetes y rezos.

 

 

CARACTERÍSTICAS DE ORULA:

  • Símbolo: Ékuele
  • Número: 4
  • Animales que come: El que menos come solo un pollo y de vez en cuando aceptará un chivo. Gallina negra, paloma y venado.
  • Hierbas: Bastón de Orula (Hierba San Francisco o Palo san Francisco), malambre, pendejera, Jengibre, Guanina, Guasimito, Don Carlos, Uvancillo, Para mí, Chinchita, mirto, Maíz, Madreselva, Galán de noche, Cañandonga (en la provincia de oriente nada más), Copey, Corozo, aguinaldo morado, aceitunillo, albahaca menuda, almorejo, altea, arabo, arabo colorado, arará, acediana, bejuco fideo, colonia, astronomía, copey, corteza de coco, ñame, ojo de profeta y paraíso.
  • Color: Verde y Amarillo
  • Día: Domingo.
    Sopera: Ikofa (cazuela pequeña de madera, en caso de awo ni orunmila será grande)
  • Herramientas: Tablero de Ifá (até), Ékuele; dos manos de ikines, 2 oráculos, una pesa y una balanza, un iddé, un cuje de álamo, un irofá (un cuerno de venado que sirve para escribir o golpear en el tablero en distintas ceremonias y un iruké (un espanta moscas hecho de pelos de cola de caballo) que se utiliza para limpiar las malas influencias. El tablero simboliza el mundo.
  • Collares: De cuentas amarillas y verdes alternas. Las pulseras o Iddé llevan las mismas cuentas en la misma disposición. Ambos se reciben con los fundamentos del Orisha, en la ceremonia de consagración de esta deidad, que dura tres días en los casos de
    mano de Orula e Ikofa.
  • Padres: Obbatalá y Yemayá Yembó
  • Saludo: Iború, Iboya Ibocheche
  • Enfermedades: Locura
  • Fecha: 4 de Octubre.
  • Orisha mayor, se representa como un señor de edad madura, sabio benefactor de quienes lo rodean. Es el dios de la adivinación. Principal consejero y bienhechor de la humanidad.

 

LOS ATRIBUTOS O HERRAMIENTAS DE ORULA (TAMBIÉN CONOCIDO COMO ORUNMILA U ORULA IFÁ) SON:

  1. Ikofá o Tablero de adivinación: Es el principal instrumento utilizado por Orula para realizar la adivinación y ofrecer consejos a sus seguidores.

  2. Irukere: Es un abanico de cola de caballo que se utiliza para limpiar y purificar el aura de las personas durante las ceremonias.

  3. Opón Ifá: Es una bandeja de madera que se utiliza para realizar la adivinación de Orula, colocando en ella diferentes elementos que representan los símbolos del sistema adivinatorio de Ifá.

  4. Ide Ifá: Es un collar sagrado que se utiliza como amuleto de protección y como símbolo de pertenencia a la religión de Ifá.

  5. Okpele: Es una cadena de adivinación que se utiliza para complementar la adivinación con el Ikofá.

  6. Agogó: Es un pequeño tambor utilizado para llamar a los espíritus y para acompañar las canciones y danzas en las ceremonias.

  7. Opa Orula: Es un bastón sagrado que representa la conexión entre Orula y sus seguidores, y se utiliza para invocar su presencia durante las ceremonias.

  8. Adimu: Son las ofrendas alimenticias que se ofrecen a Orula como muestra de respeto y gratitud. Entre los adimus más comunes se encuentran el akara (buñuelos de frijol), el eko (papilla de maíz), el obi (nuez de cola), el owó (dinero) y diferentes tipos de frutas y alimentos.

Estos atributos y herramientas son muy importantes en la religión Yoruba, ya que se consideran medios a través de los cuales Orula puede comunicarse con sus seguidores y ofrecerles consejos y protección.

 

COMO ATENDER A ORUNMILA

El 4 de octubre, día de todos los Babalawos, en este día es tu deber visitar la casa de tu padrino y de tu Yubona, ya sea con o sin derecho, con el propósito de saludar a Orula. El derecho en estos casos consiste en al menos 2 velas, 2 cocos y cualquier otro elemento que consideres apropiado. En este día, lo primero que debes hacer es arrodillarte ante Orula, apoyando ambas manos en la estera, y pedirle todo lo bueno para ti y para aquellos que estén presentes. Luego, saludas de la siguiente manera: «Orumila Iburu, Orumila Iboya, Orumila Ibosheshe…» y besas el suelo. Acto seguido, te volteas hacia donde está tu padrino y le dices: «Oluo Iburu, Oluo Iboya, Oluo Ibosheshe…» y besas el suelo. Si también se encuentra tu Yubona, le dices: «Oyubona Iburu, Oyubona Iboya, Oyubona Ibosheshe…» y besas el suelo. Y si hay más Babalawos presentes, dices: «Bogbo Iboru, Bogbo Iboya, Bogbo Ibosheshe…» y besas el suelo.

 

En cuanto al cuidado de tu ABOFAKAN o IKOFANFUN DE ORUNMILA: Debes sentarte una vez por semana o cada diez días, preferiblemente los domingos. Para hacer esto, coloca una estera cubierta por un paño blanco donde pondrás a Orula, mencionando la palabra «ARGO» (permiso) para moverlo a ambos lados, junto con dos velas. Luego, untas manteca de corojo en la izquierda y miel en la derecha; un poco en cada mano, frotando las semillas y soplando sobre ellas, mientras pides todas las cosas buenas. Para hacer esto, no puedes estar sucio, es decir, no debes haber tenido contacto sexual y no debes tener la menstruación, al menos durante 24 horas. Además, debes bañarte antes.

A este santo se le ofrecen dulces finos, pescados enteros y asados, flores, bolas de gofio. Siempre se encienden dos velas. Las ofrendas se llevan al río y se colocan fuera de la sopera, una vela a cada lado.

 

REZOS DE ORUNMILA

ORUNLA IRAN LOWO KUELÚ RE TITANCHANI NITON LE RI NA KI ORE EYENI OMO TIWÁ ILE NI TOBÍ NI GBOGBONI LAIYE ODIKIU AIKI BABA WA.

Traducción

Orunmila ayúdame con tu sabiduría y tu premonición para poder ver como tu ves lo que presenta este hijo, que vino a mi casa Usted es grande, sabio y poderoso y mi protector.


CANTOS

ORUNMILA TALADÉ, BABA MOFORIBALE ORUNLA IBORÚ E ORUNLA DI BOYE DIBO SISE

Traducción

Solo el cielo puede efectuar la salvación, es del que posea la corona. Padre yo pongo la cabeza en la tierra El cielo salva; el sacrificio se ha llevado a cabo
El sacrificio que se lleva conviene; el sacrificio es reconocido Este sacrificio abre el camino y las causas son completas.

HISTORIA DE ORUNMILA

Iracundo con sus hijos al saber que Oggún había querido fornicar con su propia madre, Obatalá ordenó matar a todos sus hijos varones. Poco después nació Orula y Babá sin decir nada lo coge y se lo lleva lejos de la casa con intenciones de matarlo. Elegguá que
lo ve salir, se disfraza de ratón y lo sigue sin hacer ruido, para ver que hacía Babá con Orula, se esconde detrás de las hierbas. Babá se detiene y comienza a cavar un hueco bastante profundo al pie de una ceiba, entierra a Orula hasta la cintura con los brazos hacia debajo de la tierra y Elegguá corre y se lo dice a su madre y entre los dos deciden no dejar morir a Orula y quien debe llevarle la comida todos los días, es Elegguá. En el mismo instante que Babá entierra a Orula, pierde la memoria y lo olvida todo.
Al poco tiempo nace Shangó, que era un niño muy fuerte y hermoso; Babá se compadece de él y no queriendo hacerle daño, piensa en Dadá, la hermana mayor de sus hijos y que esta podría cuidárselo, ya que ella vivía lejos, no le vería, no viviría con él y no tendría que matarlo. Se lo llevó a Dadá, vestido todo de rojo y le encargó que lo criase, ya que le había tomado cariño. Pasaron varios años y un día Dadá quiso que Shangó conociera a sus padres, lo volvió a vestir de rojo y lo llevó a casa de Babá. Yembó al
ver llegar a su hijo, se puso a llorar y Babá también lloraba de alegría; sentó a Shangó en sus piernas y comenzó a jugar con él.

 

Shangó que era un niño muy despierto, le preguntó a su padre porque su madre lloraba tanto y parecía no estar contenta con su visita. Babá le contestó que no era cierto que Yembó llorase por su presencia y que un día con calma él le contaría todo, ya que ni él mismo recordaba bien, todas las cosas que habían sucedido antes de que él naciera. Babá le pidió a Dadá que se lo llevara a ver todos los días. Pasaron un par de años, y cada vez que Shangó entraba, Yembó era un mar de lágrimas. Esto lo tenía disgustado, pues desde chico Shangó tenía muy mal genio, también le molestaba ver que su hermano Ozún estaba constantemente tirado en el piso a pie de la puerta y no se levantaba para nada.

 

Ese día decidió preguntarle a su madre que les había sucedido a todos ellos que parecían unos locos, ella siempre pegando gritos desaforados, el otro hermano tirado en el suelo, el padre que recordaba nada antes de que él viniera al mundo. Yembó le contesta que ella no podía hacer nada por Babá, ni decirle a él lo que pasaba en la familia, pero que el secreto de todo lo tenía su hermano Elegguá. Como Shangó y Elegguá se querían mucho y se llevaban bien, este se dirige a su hermano para que le cuente todo lo que sabía respecto a su nacimiento y el mal que aquejaba a su padre. Elegguá le dijo a Shangó: “Coge la masa de tres güiros, tres pedazos de coco, tres plumas de loro, agua de lluvia y manteca de corojo, prepara todo esto junto a una ceiba, déjalo tres días y tres noches, cuando lo saques haz un emplaste con cascarilla y como tú eres el único que Babá carga y permite que se le acerque, cuando él abra la boca, ponle un poco en la lengua, sienes y los ojos.” Shangó siguió las instrucciones de Elegguá al pie de la letra y al poco rato de untarle todas estas cosas a Babá, este comenzó a recordar lo que había pasado a Changó, sin dejar de narrarle también unos pasajes de su vida que, maravillosamente le venían a la memoria.

 

Es aquí donde nace el canto que dice:
ACHE SHANGÓ GUE MOGUE GUE GUO ORUMILA BEGUAGUA
Que quiere decir “De niño Babá le contó toda su vida a Shangó.



Shangó al escuchar todo lo sucedido, le tomó odio a Oggún, que había sido el causante de todo esto. Al terminar sus relatos, Babá se lamentó de haberle hecho daño a Orula, que no tenía la culpa de nada y dijo, para que todos le escucharan, que haría una penitencia muy severa, por lo que había hecho a Orula. Elegguá, viendo la oportunidad de salvar a su otro hermano, que aún estaba vivo, se acercó a su padre y le dijo: “Babá, yo creo que usted no va a tener que hacer penitencia. Bastante ha sufrido ya con la pérdida de la memoria y bastante ha llorado mi madre Yembó.” “¿Qué dices?” – Pregunta Babá. “¿Qué sabes tú lo que pueda aliviar mi dolor y el de tu madre?” “Escuche Babá, un día al pasar por una ceiba, vi a un hombre enterrado hasta la cintura, me compadecí de él y todos los días le llevo comida. Este hombre es un gran adivino y mucha gente va a consultarle sus problemas al pie de Iroko, pero nadie se atreve a sacarlo de donde está enterrado, por miedo a que su padre lo mate.

Al escuchar su relato yo he pensado que este hombre sea su hijo Orula.” Salió Babá hacia donde hacía mucho tiempo había enterrado a Orula, pero como todavía le fallaba algo la memoria, se perdía de vez en cuando. Cada vez que esto ocurría, Elegguá se le aparecía disfrazado de distintas formas y le indicaba el camino correcto. Por fin llega donde esta Orula enterrado, quien al ver a su padre, lo reconoce y le dice: “IBORU BABAMI” y Babá le contesta: “IBOCHECHE ORUMILA IBORU APETEVI ORUMILA.” Babá sacó a Orula del agujero y le pidió que lo perdonara y regresara con él a casa.

Orula lo abrazó y le dijo que él no tenía rencor contra su padre, pues sabía lo que le había pasado a su cabeza, pero él no se podía ir de ese lugar, ya que la ceiba le daba sus palos y los caracoles que tenía alrededor para que él adivinara y de eso vivía. Babá le contestó que no se preocupara y acto seguido se fue a la ceiba, le dio unas monedas que llevaba con él, le prometió que sería sagrada y respetada, si permitía que él cortara un pedazo de madera y le hiciera un tablero de adivinar a Orula. Iroko estuvo de acuerdo, dándole uno de sus pedazos más lindos, con él y allí mismo, Babá confeccionó un tablero redondo, recogió arena al pie de la ceiba y se lo entregó a Orula diciéndole: “Tú eres adivino y adivinarás en mi casa con este tablero de Iroko, todo buen Olúo tendrá que consultar contigo antes de hacer nada.”

Orula le contestó: “MAFEREFUN ELEGGUÁ, MAFEREFUN SHANGÓ, MAFEREFUN BABA

 

PATAKÍ DE ORUNMILA

En un día de mercado, Orunmila se encontraba haciendo adivinación para los clientes cuando apareció Olokun, el dios del mar, para solicitarle una adivinación. Orunmila se negó a realizar la consulta y le explicó que él no tenía los elementos necesarios para llevar a cabo una adivinación de calidad en el mar, y que por lo tanto, era mejor que buscara a otro sacerdote que fuera especialista en esas cuestiones.

Olokun, ofendido por la negativa de Orunmila, decidió hacer una travesura para demostrarle su poder. Esa noche, Olokun inundó el mercado y las casas cercanas al mismo, causando una gran destrucción y pérdidas económicas.

Los habitantes del pueblo, desesperados por la situación, acudieron a Orunmila en busca de ayuda. Orunmila, al ver la gravedad de la situación, decidió hacer una adivinación y descubrió que la inundación había sido causada por Olokun, quien se había sentido ofendido.

Orunmila decidió entonces realizar un ebbó para Olokun y pedirle que detuviera la inundación. El ebbó consistió en una ofrenda de diferentes elementos, incluyendo pescado, caracoles, maíz y nuez de cola. Olokun, conmovido por la ofrenda y la sabiduría de Orunmila, detuvo la inundación y el pueblo fue restaurado a su estado original.

Este pataki enseña la importancia de la humildad y el respeto hacia los dioses y la sabiduría de los sacerdotes yoruba. También demuestra la capacidad de Orunmila para resolver situaciones difíciles a través de la adivinación y el ebbó.